Y de repente un día te das cuenta de que…
… entiendes mejor a las madres/padres que a los propios alumnos/as…
... pones ejemplos de cuando eras chica y descubres que ni siquiera habían nacido…
… vas por tu casa ordenando sin darte cuenta. Incluso si ves una pelusa o una “mijita” de algo, te agachas a cogerla…
… no sabes por qué, pero de repente los problemas a veces ya sí te quitan el sueño...
…ya eres tú quien hace las cosas que antes te hacían a ti…
… y si hablas, como si fuera ayer, de un viaje que hiciste, resulta que hace 20 años…
… te faltan seres queridos mayores y tienes ya a un montón de gente chica a la que quieres…
Pero te sientes joven, como siempre - o casi - y el paso de los años te hace sentirte feliz y agradecida.