
Hoy hace 30 años que murió la antropóloga estadounidense Margaret Mead, cuyos estudios sobre la adolescencia en Samoa, hacia 1925, apuntaban que aquellas sociedades en las que se permite a los niños conocer la actividad sexual adulta, presenciar nacimientos y muertes y conocer con precisión los roles que implicará el ser adulto (realización de trabajos, actitudes dominantes y asertivas, etc), establecían una transición serena y gradual hacia la vida adulta. Es decir, que el paso de la infancia a la adolescencia en Samoa era suave y no estaba marcado por las angustias emocionales o psicológicas, la ansiedad y la confusión observadas en otras culturas occidentales.
También hace 91 años que murió Émile Durkheim, uno de los fundadores de la sociología moderna y autor prolífico de muchas investigaciones sociológicas con influencia en el mundo educativo. Durkheim define la educación como la acción ejercida por los adultos sobre los jóvenes; o sea, le otorga un sentido unidireccional, desde la sociedad al maestro y del maestro al niño, descartando ideas como la importancia del aprendizaje entre iguales y basándose casi exclusivamente en la función de la escuela como transmisora del orden social establecido.
Hoy hace 37 años que en España empezó a funcionar el Teléfono de la Esperanza.
Y 13 años desde que la UNESCO aprobó en París el día 23 de abril como Día Mundial del Libro, elección determinada por la conmemoración de la muerte de escritores de la talla de Miguel de Cervantes, Garcilaso de la Vega y William Shakespeare.